Queens of the Stone Age
Quiero comenzar el año hablando de la que considero es la mejor banda de rock del momento. Queens of the Stone Age hace una música con un sonido único, un sonido denso, visceral, ruidoso pero organizado, diferente de todo lo que está rotando actualmente.
Sus canciones, muchas veces una suma de patrones con pocas variaciones, muchas veces mecánicas y pesadas por la carencia de solos de guitarra y de arreglos virtuosos, son como un animal enorme aplastando la monotonía del rock tradicional que a partir de comienzos de la década pasada se quedó repitiendo las fórmulas heredadas de los noventas o revivendo el sonido de los ochentas y setentas. Y, contrario a lo que suele pasarles a muchos grandes grupos de rock después de su tercer disco, QotSA sólo suena mejor con cada nueva producción.
Me parece, por ejemplo, que Nine Inch Nails, Tool y Deftones, tres grupos que cuento entre mis preferidos de todos los tiempos, perdieron fuerza después de The Fragile, Ænima y Deftones (2003) respectivamente. Tanto sus composiciones como sus letras decayeron o al menos se desviaron en una dirección que suscita menos interés en mí.
Radiohead sigue siendo siempre una caja de sorpresas agradables y, sin embargo, creo que no hay nada que se le compare al Ok Computer… al menos no como conjunto, no como obra de arte. Esto a pesar de que In Rainbows, Kid A y Hail to the Thief sigan pareciéndome discos increíbles.
Arctic Monkeys sacó hace poco un muy buen disco (Hambug, producido por Josh Homme, vocalista y guitarrista de QotSA). Pero su música sigue estando un poco cruda para mi gusto, además de notársele demasiado la influencia, precisamente, de Queens of the Stone Age.
Mars Volta me llegó a gustar mucho con De-loused in the Comatorium. Pero después cayeron en el rebusque del virtuosismo más arbitrario, el mismo que no me permite apreciar la músca de Dream Theatre.
Björk, cuyos primeros tres discos todavía disfruto enormemente (y de quien quiero hablar a pesar de no ser rock), se enloqueció cuando sacó Medulla. Es verdad que se puede obtener un cierto placer escuchando sus disparates mientras uno dice «interesante, interesante» con un gesto forzado. Pero siendo sinceros, su música se convirtió en una payasada intelectualoide fácilmente ubicable en el mismo plano del arte conceptual.
Así, sin más, quiero comenzar el año escuchando mucho QotSA, esperando que saquen un nuevo disco pronto y deseando poderlos ver en vivo otra vez.
Imagen extraída de aquí.
Otros artículos de música aquí
Definitivamente los músicos deberían aprender a retirarse a buen tiempo.Y Björk sí que se volvió aburrida desde que se metió con la estrella del arte conceptual, Matthew Barney. Con razón…¡Lástima!
Y es que lo nuevo por ser nuevo no significa que sea bueno, larga vida, o no mejor, prolifica vida a Homme & Cia, que por cierto anda haciendo de las suyas con them Crooked Vultures.
De Josh Homme también está Dessert Sessions y Kyuss, aunque esa es música es bastante vieja . pero Queens está mejojr de todas formas.
Yo estuve en el concierto de qotsa en paris y es el mejor que he visto en mi vida.