El mundo se va a acabar

El mundo se va a acabar, pero no en el 2012. No se acabó ni el 1 de enero del año 1000, como lo predijo el Papa Silvestre II, ni antes de 1600, como lo aseguró Martín Lutero, ni en 1975 o 1984, como lo esperaban los Testigos de Jehová. Tampoco se acabó en 1999, como habría querido Nostradamus para no quedar como un farsante, ni en el año 2003, como lo predijo la secta japonesa Aum Shinrikyo antes de lanzar un ataque con gas venenoso en el metro de Tokyo  (¿cómo es que nadie predijo eso?). Y ni hablar del año 2011, que nos dejó esperando a los que nos dijeron que el cometa Elenín (llamado cariñosamente C/2010 X1 por los científicos) se estrellaría contra la tierra en octubre. Sí, el mundo se va a acabar. Pero no, su final no se puede anticipar.

Ya otras predicciones habían fallado antes: Cristo no regresó en 1889, como se lo prometió a los Menonitas, ni en 1914, como lo preveían ―otra vez― los Testigos de Jehová.  Tampoco les cumplió a los Mormones, quienes lo esperaban con bombos y platillos en Missouri en algún momento del 2000. Ni siquiera Jerry Falwell, pastor de una iglesia bautista, quien se dio el lujo de darles un margen de error de diez años a sus predicciones (1999-2009) se salvó de quedar como un hablamierda. Es como si Dios les mamara gallo a todos con su humor divino.

Claro que el Anticristo tampoco es que cumpla sus promesas. Peter Olivi, teólogo franciscano francés del siglo XIII, predijo su llegada para el año 2000, pero éste no se apareció (¿tal vez el Y2K tuvo algo que ver?). Y no fue la primera vez: en el año 400 dejó metido a San Martín de Tours, en 1378 a Arnau de Vilanova, en 1657 a la secta de la Quinta Monarquía y en 1789 a Pierre d’Ailly. Cristo y el Anticristo tienen en común, además de servirles de amigos imaginarios a algunos adultos, que son más incumplidos que un alcalde de Bogotá.

Ahora bien, el hijo de Dios todavía podría reivinidicarse: el famoso televangelista gringo Jack Van Impe aseguró en su programa de televisión que Jesús vendrá por segunda vez en 2012. Y Alice Baily, teosofista de la Nueva Era, dijo que lo haría en el año 2025, pero bajo el pseudónimo de Maitreya. Pero entre 1700 y 2011 ya nos dejó metidos más de veinte veces… ¿por qué habríamos de creerle esta vez? Además, según los Mayas, el mundo se acabaría antes del regreso de Cristo. Tal vez la pregunta debería ser: ¿a quién deberíamos creerle esta vez?

Propongo, para variar, que me crean a mí: predigo que, en efecto, el mundo se va a acabar, y que ni los ecologistas más implacables podrán salvarlo con sus agendas políticamente correctas ni los católicos más obtusos con su sus biblias y sus rosarios. También predigo que ni un solo ser humano vivo actualmente, ni sus hijos ni los hijos de sus hijos, vivirán lo suficiente para verlo. El mundo se acabará cuando el azar así lo mande, no cuando Cristo venga a separar las ovejas negras de las blancas como quien desecha las papas podridas de un costal, ni cuando su primo, el Anticristo, se tome la molestia de visitarnos con sus amigos de siete cabezas y siete colas.

Por último, predigo que al menos el setenta y siete por ciento de la humanidad seguirá creyendo en las predicciones más estúpidas ―y en las más creativas e ingeniosas también― hasta el final de los tiempos, y que a todo aquel al que no le guste este texto le crecerán gusanos peludos y verdes de los pezones.

Si sí le gustó este texto, tal vez le guste:
El líder corporativo más hermoso del mundo
«Usted es una mamacita»
¡Ex! Plíquese

Información adicional:
Top 10 failed apocalyptic predictions
Unfulfilled religious predictions

Imágenes:
James Jean

Comments
11 Responses to “El mundo se va a acabar”
  1. zhero dice:

    Jajajajaja excelente

  2. anónimo dice:

    A comer beber y tirar que el mundo se va a acabar. Muy buen texto.

  3. Piru dice:

    Estoy por pensar que a usted se le alborotó el ateísmo gracias a esos viajes que hizo a Europa. Y parece que a su amiga pintora también. ¡Qué contradicción! Por eso será que las pinturas de santas que realiza carecen de la mística necesaria y se ven un poco superficiales. Debería dejar el tema pues si no creen en lo que pinta, ¿para qué lo pinta?, lo mismo: usted también debería dejar de hablar de religión.

    La segunda venida de Cristo es una metáfora para decir que vuelve en el Corazón de las personas, es decir que los buenos sentimientos que Cristo trajo a los hombres vuelven constantemente y eso puede pasar en el año 1000, 1500, 2300, así que siempre habrá al menos uno que diga que si llegó.

    De todas formas, se trata de un tema muy personal, y por más inteligente o burlón que usted sea, no va a lograr que los demás cambien de opinión en algo tan intimo como las creencias religiosas.

    Sin embargo me divierte leerlo. Un saludo y no olvide limpiar el pesebre.

    • Nykolai D. dice:

      «si no creen en lo que pinta, ¿para qué lo pinta?». Es decir que para pintar un santo o hablar de religión es necesario ser creyente. Brillante razonamiento.

      Por otro lado, no me importa que la gente cambie sus creencias por influencia de mis textos. No es la intención.

      Y si lee con cuidado, notará que mi problema no es con las tradiciones inofensivas, como el pesebre, sino con la Iglesia y los creyentes imbéciles.

      Un saludo.

    • Boris dice:

      a mi no me cabe un Cristo en el corazón. Tendría que ser chiquitico…
      y si llegó o no… es dificil saberlo, algunos lo fingen muy bien.

  4. MOR dice:

    Nicolás,
    Disfruto leer la mayoría de sus artículos y muchas veces comparto sus puntos de vista. En esta ocasión yo sí creo que vamos a acabar al mundo; tarde o temprano la ceguedad del hombre causada por su avaricia y amor por lo profano y vano estará a punto de acabar con este planeta.
    Por otra parte soy «Mormón» por convicción y no uno novato y hasta la fecha nunca escuche antes de la profecía del fin del mundo que cita en su ensayo. Podría por favor soportar su aseveración haciendo la debida referencia a una fuente oficial de la Iglesia?
    Me parece que citar a la ligera información no corroborada o de procedencia amarillista, solo para darle color a sus escritos, le resta un poco de credibilidad a su opinión y a sus publicaciones.
    MOR

    • Nykolai D. dice:

      Mor, tiene razón en que los datos aparecen citados de forma un poco ligera. Lo hago de esta manera para respetar el ritmo del escrito, que no es un ensayo sino un texto libre.

      Mi aseveración sobre esa segunda venida de Cristo, esperada por los Mormones para el 2000 pero que nunca llegó, está basada en el libro «Watch and be ready: Preparing for the Second Coming of the Lord», por Robert Millet (http://bit.ly/w0ZTUa), académico experto en la doctrina mormona. Entre otras cosas, dice:

      «During the Millennium, Zion will have two great centers—Jerusalem of old and a New Jerusalem in America—from which «the law» and the «word of the Lord» will go forth to the world (Isaiah 2:3; Ether 13:2-11).» (Cap. 5, Establishing Zion in Preparation for the Second Coming).

      Este libro asegura que, con el nuevo milenio (año 2000), Dios regresará a la tierra a imponer su ley desde dos locaciones concretas: Jerusalén y el Nuevo Jerusalén, éste último ubicado en la ciudad de Independance, Missouri, USA. Las afirmaciones de Millet, hechas en 1994, están basadas en las predicciones de Joseph Smith, fundador y «profeta» del Movimiento de los Santos de los Últimos Días, que más tarde daría origen a la Iglesia Mormona.

      Quiero aclarar, de todas formas, que para nada soy un experto en el tema. Si le parece que estoy omitiendo o malinterpretando algo, no dude en decirme.

      Gracias por su comentario, sígase pasando.

      Nicolás.

      • MOR dice:

        Gracias por su respuesta Nicolás. Tiene razón, la cita es válida y todo lo que dice está de acuerdo con la doctrina y creencias de los santos de los últimos días, o mormones; el error de interpretación que está cometiendo es que el nuevo milenio hace referencia a un periodo de mil años que comenzaran con la segunda venida de Cristo, no al año 2000 ni ninguna otra fecha específica en el calendario.

        Creemos que Jesucristo volverá a la tierra y reclamara su derecho de gobernar sobre el género humano, acabara la guerra y habrá mil años o «milenio» de paz, prosperidad y mucho trabajo. Al cabo de este periodo, una vez terminado el trabajo pendiente en su mayoría relacionado con la genealogía del género humano, vendrá lo que se conoce como juicio final y aquello que mencionaste de las ovejitas a la derecha y a la izquierda. Durante ese periodo de mil anos vivirán aquellos que son los justos de la tierra, no los mormones, ni siquiera me refiero a los creyentes de ninguna denominación, solo a la gente honorable de la tierra. Es un tema demasiado extenso que no considero apropiado exponer aquí y ahora, pero es bastante interesante.

        Gracias por su consideración al responder a esta observación, su gallardía es una de las cosas que aprecio de su persona y de su publicación.

        MOR

  5. Piru dice:

    Pues veo que pinta esas obras de una manera muy convencional. Es decir pinta esos santos con aureolas, vestimentas tradiciones de la virgen, posiciones clásicas y beatificas etc, y al mismo tiempo dice que no cree en nada de lo que esos símbolos representan. ¿es coherente? me pregunto. Lo que sí creo es que las obras no captan el sentimiento religioso que normalmente uno esperaría ver asociado a esos símbolos pintados de esa manera. Por eso me parece que las pinturas prometen algo que no cumplen. De todas formas, es una opinión personal, no soy un experto en el tema.

Trackbacks
Check out what others are saying...
  1. […] ahora que el fin del mundo está tan cerca (lo dicen todos aquellos que no están tratando de salvar a los toros con una […]

  2. […] ¿Lo asustó este texto? Tal vez también lo asuste: Miércoles de no solo ceniza El mundo se va a acabar […]



Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.

  • Books & Reading Blogs - BlogCatalog Blog Directory